Cronica: Congreso Internacional de Jiu-Jitsu y Defensa Personal Policial Salamanca 10-Abril-2010

Congreso Internacional de Jiu-Jitsu y Defensa Personal Policial

Salamanca 10-Abril-2010

Esta es la primera crónica que escribimos desde Iudo.es así que ruego disculpéis sus defectos.

El sábado 1 de Abril a las 8:30 (de la mañana para unos, de la madrugada para otros) comenzó la recogida de credenciales para participar en el Congreso Internacional de Jiu-Jitsu y Defensa Personal Policial que se ha celebrado en Salamanca, impartido por los maestros Alain Sailly, Cosimo Costa y José María Benito García.

El acontecimiento se celebró en una de las salas del Hotel Regio (situado a unos 4 Km. del centro de la ciudad), donde los participantes (según su deseo) pudieron alojarse.

Así, los componentes de nuestro grupo tras salir la tarde del viernes desde Madrid, fuimos llegando poco a poco, aprovechando para disfrutar un poquito la bella ciudad de Salamanca y pasando la noche en el mismo hotel en el que se celebraría el Congreso (algo que algunos no pudieron hacer teniendo que llegar a Salamanca la misma mañana del Congreso, esfuerzo que les honra).

Después de un desayuno rápido nos pusimos el gi, recogimos la credencial y pasamos a la sala donde se había montado un tatami bastante grande (previendo los 150 participantes que se esperaban).

Tras la debida presentación y el saludo correspondientes el tatami se dividió en tres partes: cinturones blancos, cinturones de color y cintos negros, pasando cada maestro por los diferentes grupos.

Entre los participantes se observó gran variedad: gente de la academia de policía de Madrid, de Goshindo, de Taekwondo, de Jiu-Jitsu…

A los congresos siempre se va con la incertidumbre que provoca el no saber que nos vamos a encontrar, la duda de si gustaran o no, pero lo que siempre es seguro es que algo, por pequeño que sea, siempre se aprende.

Con respecto a Alain Sailly, los que ya le conocíamos, nos seguimos maravillando con su elegancia, los que no tenían el gusto quedaron encantados. Con un poquito más de peso (eso le pasa a cualquiera) pero con la misma velocidad, dinamismo y estética de siempre, y con esa simpatía que hace que, aún expresándose en inglés, los que solo sabemos español le entendemos perfectamente.

Sobre Cosimo Costa sabíamos poco lo que provocó que necesitase mayor tiempo para presentarse y porque no decirlo “venderse” para que de esa forma le vuelvan a llamar y podamos volver a disfrutarle. Como él mismo dijo, se había olvidado de traer técnicas solo traía bases, eso sí varias de las partes más importantes de la defensa, sin las que ésta es imposible: el desplazamiento, la postura, el equilibrio… El maestro Cosimo, de Sicilia, (que aunque él dijo que no, hablaba español perfectamente) desarrolló los principios de su escuela Mizu-Ryu basados en sus conocimientos como profesor de educación física en la universidad. Vino acompañado por el maestro Fabio que le ayudó como uke y nos brindó una sorprendente exhibición con palo largo, al final del Congreso.

Y respecto a José María Benito García, su currículo lo dice todo; inspector jefe del cuerpo nacional de policía, asesor de Naciones Unidas y la Unión Europea en Defensa Personal Policial, 8º Dan de Defensa Personal Policial, 8º Dan de Judo, entrenador nacional de Defensa Personal Policial, Judo, Sambo, Lucha Libre Olímpica, Kobudo policial. Desarrolló un trabajo con grillete y bastón policial

Al medio día, como estaba previsto, nos llevaron a comer a una finca ganadera salmantina con capea incluida, donde algunos intrépidos demostraron su soltura.

Tal vez la parte negativa se produjo en este momento donde algunos participantes, (achaquémoslo a su edad o inexperiencia) tomaron alguna copa de más, provocando cierto revuelo molesto en la jornada de entrenamiento de la tarde.

Por la tarde los tres grupos se unificaron en uno sólo pasando los maestros, por turnos, a exponer sus trabajos.

El cierre del Congreso vino con el aplauso hacia loa maestros, la organización y los maestros que asistieron con sus alumnos.

Y por la noche, que decir, Salamanca, ¡qué raciones!, ¡qué tapas!, ¡qué ciudad más viva!… en fin, increíble.

Como conclusión decir que el Congreso nos dejó, en general, buen sabor de boca y la ciudad, el estómago lleno.

Así pues, el que esto escribe os recomienda, si el dinero y las circunstancias os lo permiten, asistir al siguiente congreso y si es fuera de Madrid mejor, pues la experiencia es muy positiva.

Crónica de nuestro enviado especial a Salamanca.